miércoles, 17 de junio de 2009

Décimas por Benedetti

Te abrazo, poeta Mario
Benedetti, convencido
del amor, comprometido,
cotidiano, solidario.
Tu verso es un silabario
y como el pan o el arroz
nos alimenta tu voz
que en la Sala de las Artes
retumbó como estandarte:
somos mucho más que dos…

Y la Sala de las Artes
se repletó aquella vez,
porque tu palabra es
para mi pueblo un baluarte.
Por eso querrá escucharte
siempre erizada la piel
y a tu canto será fiel
intacto en tu voz preclara,
o en la de Nacha Guevara
o en la de Joan Manuel…

Prestaste igual atención
a tan diferentes sueños:
desde los Olimareños
al Conde de Lautréamont…
Tu puente entre la canción
y el poema en castellano,
tan latinoamericano,
tan vibrante, tan ardiente,
es más que eso, es un puente
entre los seres humanos…

Tu papel mojado quiso
enlazar –fue tu deseo–
el mar de Montevideo
al mar de Valparaíso.
Detestabas lo postizo,
lo trucho, lo artificial,
y como buen oriental
no alzaste tu poesía
como si fuera el vigía
del legado occidental…

Pero fuiste igual un faro
que alumbró la noche oscura,
pues tu canto y tu lectura
eran como un día claro…
Sobreviviendo al amparo
de tu mensaje, poeta,
alcanzamos nuestra meta
y fuiste de tanta ayuda
como Víctor y Neruda,
como Silvio y la Violeta…

Hace años fui a disfrutar
bajo el uruguayo sol,
al Palacio Peñarol
me invitaron a cantar…
Luego había que bailar
con las murgas, por supuesto,
y el popular manifiesto
de una nación hermana
oí en Araca la cana,
la BCG y Falta y resto…

Regresaré a tu país,
ya sueño con ese viaje,
para cantar mi homenaje
a tu verso y tu raíz.
En un reencuentro feliz,
sin láser y sin confetti,
cantaremos con Viglietti
en tu amada patria hermosa,
en la Sala Zitarrosa
o en el Teatro Benedetti!

Eduardo Peralta

1 comentario:

Tata Nicolás dijo...

Muy bien Eduardo. S
on exelentes tus décimas y merecidas para Mario.